Según anunció, en los próximos 30 días la app de delivery de comidas dejará de operar en Argentina, aunque seguirá con el servicio de pasajeros y compensará a los repartidores.

La misma decisión tomó en Colombia y antes lo había hecho en Uruguay.

“Seguimos totalmente comprometidos con nuestras inversiones en ambos países, ofreciendo a las personas una solución de movilidad segura, accesible y confiable”, aseguraron desde la empresa.

Uber Eats había llegado a la Argentina en 2018 y se había asociado con restaurantes para ofrecerles el servicio de delivery.